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lunes, 19 de octubre de 2009

APUNTES SOBRE PIERRE BOURDIEU

Instituto Secundario Sagrada Familia. Asignatura: Sociología. Sexto año “A”. Apuntes de clases

Pierre Bourdieu
(1930-2002)

Bourdieu, no ajeno a la problemática cultural se pregunta ¿Quiénes somos?, y frente a su inquietud ensaya respuestas articulando dos planos: el económico y el simbólico, ambos necesarios para construir poder.
El sociólogo francés, analizó cómo en el espacio social (una sociedad históricamente determinada) sus miembros y grupos ocupan determinadas posiciones y tienen acceso desigual a los bienes disponibles.
Bourdieu, en su teoría utilizó el término capital (que posee una persona) y que permite estructurar el espacio social, Definiéndolo como “el conjunto de bienes acumulados que se producen, se distribuyen, se consumen, se incrementan y se pierden”. Atribuyéndole las siguientes características:
v Se acumula.
v Se transfiere
v Permite obtener ganancias.

Hay diferentes tipos de capitales:
1. Capital Económico: Considerado por Bourdieu como el capital más importante, y construido a través de factores de producción como la tierra.
2. Capital Simbólico: Referido al honor, al reconocimiento que los otros hacen sobre mi persona que me posibilita ventajas.
3. Capital Social: referido a redes de las que dispone un sujeto o grupo de hombres. Es importante el capital para llevar adelante una red.
4. Capital Cultural: Por ejemplo los títulos académicos, las destrezas para expresarse que pueda poseer una persona. Las obras literarias de un escritor o las pinturas de un pintor.

El capital simbólico se refiere a la posición social adquirida. Constituido por un conjunto de elementos interrelacionados de los diferentes capmos culturales. Debe considerarse económicamente y socialmente relevantes en términos sociales.
Pierre Bourdieu, plantea la siguiente distribución de los agentes sociales a partir de una jererquización social, a partir de:
El volumen del capital: Cumbre de la jerarquía: empleadores, profesionales, profesores universitarios. En la parte baja de la escala social se ubican: asalariados, obreros, agricultores (desprovisto de todo capital cultural y económico).
La estructura del capital (tipos de capital en juego): Prevalece el capital económico sobre el capital cultural. Por ejemplo los industriales o comerciantes poseen gran cantidad de capital económico pero carecen de capital cultural; en el caso de los docentes universitarios poseen escaso capital económico y mayor capital cultural.

Bourdieu, identifica dentro del espacio social tres clases:
Clases dominantes: Con gran capital (sobretodo económico, sus miembros acumulan capital, constituido por grupos a la que los sujetos pertenecen por herencia).
La pequeña burguesía: quienes ocupan una posición media en el espacio social: asalariados, trabajadores autónomos o empleadores. Constituida por una pequeña burguesía en decadencia (artesanos y comerciantes).

Dentro de esta clase social (la pequeña burguesía), Bourdieu diferencia: una burguesía de ejecución (ejecutivos medios de las empresas privadas, técnicos, maestros); y la nueva pequeña burguesía, compuesta por pequeños burguesas con mucho capital cultural y poco capital social.
Las clases populares: Caracterizada esta clase por una ausencia casi total de capital. Bourdieu, hace una distinción secundaria entre los obreros y los pequeños agricultores por un lado y los pequeños asalariados por otro.

Campo y Habitus

Bourdieu, se propone analizar la relación entre el consumo cultural y los modos de producción. Para lo cual introduce los conceptos de campo y habitus.
El sociólogo francés define al campo como: “espacios de juegos históricamente construidos con sus instituciones específicas y sus leyes de funcionamiento propias”.
Los campos se presentan como “sistemas de posiciones y de relaciones entre posiciones”, espacios estructurados de posiciones. Campos que están definidos según lo que esté en juego (el bien en disputa).
El bien en juego es la condición necesaria para que el campo funcione. Frente a la pregunta: ¿Qué es lo que define cada campo?, la respuesta es el capital que está en juego. La lucha de fuerzas en cada campo está constituida por el tipo de capital. Y en cuanto a ¿Qué bien constituye un campo?, la respuesta es todo bien acumulable, buscado, escaso y que produzca interés pos su acumulación.
El campo plantea el sociólogo francés que es la instancia mediadora entre la estructura y la superestructura, entre lo individual y lo social. Cada campo tiene su propia dinámica, sus mecanismos de reproducción y consagraciones capaces de orientar o coaccionar las prácticas o sus representaciones.
Existen relaciones entre los diferentes campos. Según Bourdieu, los campos son espacios de poder, sistemas de relaciones de fuerzas. Las fuerzas en pugna lucharán por mantener o transformar el estado de fuerzas existentes.
Los sectores sociales que poseen capital simbólico luchan por imponer su propio sistema de interpretación del mundo social.
El espacio social de los campos culturales están atravesados por la diferenciación social o sea por distinciones entre posiciones a partir de los recursos (o capital) que se posea entre quienes aspiren a una posición social de privilegio.
Bourdieu sostiene que la sociedad es un conjunto de campos sociales autónomos atravesados por luchas entre clases.
Hay diferentes campos, religiosos, político, económico, campo del deporte, campo científico, etc. Lo que implica la existencia de campos diversos.
El pensador francés, sostuvo que un campo puede ser considerado como un mercado, en el que los agentes se comportan como jugadores. Un campo es un espacio de fuerzas, de poder.
Bourdieu, para explicar el comportamiento de los agentes dentro del campo, recurre a la analogía del juego. Planteando que las estrategias de los jugadores depende del
volumen de su capital y de su estructura. El objetivo es acumular la mayor cantidad de capital respetando las reglas del juego.
El campo puede concebirse como un mercado con productores y consumidores de bienes. Los productores (individuos provistos de capital) se enfrentan y en su lucha se pone en juego la acumulación del capital que permite asegurar la dominación del campo. La posición de los agentes en el campo depende de la posición de éstos dentro del espacio social.
El campo, se delimita cuando se identifica el bien en disputa. Bourdieu, lo asemeja a un campo, un campo de juego con jugadores, reglas de juego y un interés: obtener un bien. Los jugadores poseen estrategias o sea un plan.
El interés (illusio,), Es condición y fundamento de un campo. Todo campo engendra y activa una forma específica de interés específico que es la condición para su funcionamiento. Hay tantos intereses como campos, lo que hace determinar las condiciones sociales de producción de cada interés, su contenido.
Bourdieu, define dos tipos de interés:
Interés genérico: asociado al hecho de participar en el juego, intereses ligados a la existencia misma del campo. Acuerdos que merecen engendrar una lucha.
Interés específico: Se define en relación al campo de lucha y en relación a la posición social ocupada.
El concepto de habitus (habito), representa la conquista de posiciones simbólicas. Cada posición en el espacio social y en diferentes campos supone habitus específicos que combina el grado individual y la adaptación social al fenómeno en cuestión.
No es un concepto definido por Bourdieu, él lo toma de la filosofía clásica. El habitus permite articular lo individual y lo social, y las estructuras externas e internas, estas dos últimas pertenecen a la misma realidad social.
El habitus, es producto de la internalización de los principios de una cultura. Es la historia hecha cuerpo. Producto de la historia es lo social incorporando estructuras estructurantes. Como estructura estructurada, el habitus se contribuye como esquema organizador de las prácticas sociales y las percepciones de las prácticas de los demás agentes.
Hablar de habitus, es plantear que lo individual, lo subjetivo. Lo personal es social, producto de la historia colectiva.
Por ejemplo usar una determinada vestimenta, escuchar cierta música o tener gustos específicos, implican grados de distinción que supone tener ciertos habitus o visiones del mundo.
El habitus es el resultado de condicionamientos sociales que se convirtieron en hábitos de los sujetos. Es un principio unificador que manifiesta un estilo de vida.
El habitus, son esquemas clasificatorios que conforman una determinada visión, gustos diferentes, preferencias y signos variados.
El habitus proporciona la articulación entre lo individual y lo colectivo. Es un concepto que permite comprender de que manera el hombre se convierte en un ser social. Se trata de un sistema de disposiciones duraderas adquirido por el individuo en el transcurso del proceso de socialización. Las disposiciones son maneras de sentir, de hacer, de pensar internalizadas v por los hombres.
El habitus, se ubica en el fundamento de la personalidad de un individuo.
Para Bourieu, el concepto de habitus es una alternativa superadora del objetivismo y el subjetivismo.
El siguiente cuadro presenta las características con las diferencias entre ambas alternativas:

Subjetivismo (sujetos)
Objetivismo (estructura)
Actores.
Paradigma del interaccionismo simbólico.
Acción libre.
Voluntad individual.
Construcción a partir de pequeñas interacciones.
Microsociología.
Sistema de condicionamientos externos (inconscientes) a la voluntad del sujeto.
Escasa o nula autonomía del sujeto.

El habitus se define como la aptitud de moverse, actuar y orientarse según la posición ocupada en el espacio social. El habitus, surge desde el momento en que nacemos y nos adscribe a esquemas que los tomamos como inconscientes y reproducimos.

Efectos estructurales del habitus

Bourdieu define el estilo de vida como el conjunto de gustos, creencias y prácticas sistemáticas características de una clase social. Referido a las prácticas sexuales, alimenticias, de vestimentas, culturales, etc.
El habitus es el principio unificador que traduce las características del estilo de vida de una posición social.
Bourdieu, en la sociedad francesa contemporánea, distinguió tres estilos de vida diferentes:
La clase dominante: Los miembros están dotados de un habitus fundado en la idea de distinción. Por ejemplo distinción en cuanto a la elección del amoblamiento interior de las grandes casonas francesas (preferencia por los muebles antiguos) o de lugares de vacaciones como el mar mediterráneo, mar negro o mar caspio. Esta clase posee un importante capital económico que se manifiestan en sus gustos refinados por autos de lujo, obras de artes, viajes, teatros o música clásica. etc.

Habitus de los miembros de la pequeña burguesía: Anhelo de ascenso social. Un habitus basado en el deber del placer como por ejemplo escuchar su cuerpo, la relajación o la alimentación sana. Sin embargo Bourdieu diferencia a la pequeña burguesía con la pequeña burguesía en decadencia, esta última se distingue de la primera por preferencias más austeras y tradicionales con predominio en valores como el trabajo, el orden y la rigurosidad.

Clases populares: habitus fuertemente marcado por el sentido de la necesidad y de la adaptación a ella. Ejemplo los obreros de ropas sencillas, asalariados que venden sus fuerzas de trabajo. En esta clase hay una importante valoración de la fuerza física como dimensión de virilidad.

Fuente bibliográfica:
Bonmewitz, Patricia. “La sociología de Pierre Bourdieu”. Ed. Nueva visión. Buenos Aires. 2003.
Gutiérrez, Alicia. “Pierre Bourdieu. Las prácticas sociales”. Ed. Universidad Nacional de Misiones. Posadas (1997).

miércoles, 14 de octubre de 2009

La Generación de 1837

Instituto Secundario Sagrada Familia. Asignatura: Sociología. Sexto año “A”. Apuntes de clases

La Generación de 1837
(Alberdi, Echeverría y Sarmiento)

En el año 1831, un grupo de jóvenes intelectuales (José Mármol, Esteban Echeverría, Domingo Faustino Sarmiento, Juan Bautista Alberdi), entre otros se unieron para formar “La Asociación de la Joven Argentina”.
La asociación fue presidida por Esteban Echeverría, teniendo como misión continuar los ideales de la gesta revolucionaria de 1810.
Con el gobierno de Juan Manuel de Rosas (1829-1852), de a poco los jóvenes de la generación de 1837 debieron exiliarse (algunos optaron por países vecinos como Chile o Uruguay y estando en estos países desarrollaron la mayor parte de sus obras literarias).Rosas como gobernador de Buenos Aires, había organizado un servicio secreto de represión con hombres encargados de castigar y apresar a todo opositor al gobierno, por ordenes del gobernador de Buenos Aires Juan Manuel de Rosas.
La generación del ´37, fue crítica de la política dictatorial de Rosas y percibiendo ser apresados y castigados por el régimen rosista debieron exiliarse para salvar sus vidas.
Ideológicamente la mayor distancia existente entre estos intelectuales existió entre Sarmiento y Alberdi. El primero pensaba en la diferencia entre la civilización (de las ciudades) y la barbarie (de las campañas); sosteniendo que ni bien a dónde terminaba la ciudad comenzaba la barbarie.
Juan Bautista Alberdi, no era partidario de la división social que planteó su contemporáneo Sarmiento. Sostenía Alberdi que si de dividir a la sociedad se trata, cabría distinguir entre indios y europeos. Planteó lo contrario a Sarmiento que la civilización se ubicaba en el interior y la barbarie en la ciudad.
Otro distanciamiento ideológico entre los pensadores de la generación del ´37, fue en materia educativa. Mientras que Esteban Echeverría y Sarmiento planteaban la educación dirigida a fines políticos y destinados principalmente a una educación elemental. Al respecto, Alberdi no negó la necesidad de una educación elemental, pero reconoce la necesidad de una educación basada en la formación práctica de los ciudadanos.
Domingo Faustino Sarmiento en su libro “El Facundo”, (texto difícilmente de ubicar dentro de un género literario específico, hay quienes sostienen que es un ensayo, otros que se trata de un texto semejante a la psicología social) plantea claramente el desprecio por la barbarie encarnada en la figura del gaucho, mostrando de éste el aspecto de un hombre desacatado de la ley, sin un rumbo fijo, con poco ánimo de trabajo. No hay interés por parte de Sarmiento en resaltar ni un solo aspecto positivo de su figura como por ejemplo su aporte como soldado que luchó por la independencia de la Argentina. Planteando, además, un distanciamiento entre Buenos Aires (una ciudad que muestra progreso, avance con interés en asemejarse a Europa) y Córdoba, colonial, estanciero como un gran monasterio por la cantidad de iglesias, resaltando la reminiscencia colonial-española.
Echeverría en su libro “El Matadero”, plantea claramente el régimen tirano de Juan Manuel de Rosas. Alberdi en un primer momento apoyó al gobierno de Rosas creyendo que traería el progreso, el desarrollo a la Nación y que comprendía las necesidades de la República, trayendo la democracia, hasta convertirse en víctima de la dictadura rosista y ante su persecución debió exiliarse en el Uruguay.
Luego del régimen de Juan Manuel de Rosas (blanco de críticas de la generación del ´37), se entabló una enemistad irreconciliable entre Sarmiento y Alberdi.
Alberdi y Echeverría (al igual que Sarmiento en un principio) creyeron en la posibilidad de imitar en la pampa Argentina el modelo de la Europa del norte.
Sarmiento cambiando en su pensamiento, sostuvo que el modelo a imitar era la avanzada sociedad estadounidense, (tras haber visitado Europa y encontrar pobres, y miseria por todas partes) en la que admiraba el avance del ferrocarril como emblema del progreso.
Otro distanciamiento más entre Sarmiento y Alberdi, era que el primero pretendía poblar la Argentina con hombres intelectuales, profesionales (abogados, escribanos), etc. Alberdi por su parte sostenía que había que poblar a la Argentina con hombres laboriosos que sepan trabajar la tierra y no con inútiles profesionales. Aquí queda reflejado el distanciamiento entre estos dos intelectuales también en política poblacionaria.

Etapas de la Sociología en Argentina

Instituto Secundario Sagrada Familia. Asignatura: Sociología. Sexto año “A”. Apuntes de clases

Etapas de la sociología en la Argentina

La recepción de la sociología en la Argentina tuvo principalmente tres etapas, y sus características más importantes están expuestas en el siguiente cuadro comparativo:


Etapa de la Sociología científica
Luego de 1816, hasta finales del siglo XIX.
Exponentes principales: Juan Bautista Alberdi, Domingo Faustino Sarmiento, Esteban Echeverría.
Producción literaria: ensayos.
Falta de objetividad.
Ensayos subjetivos con contenidos valorativos.
Ensayos plasmados de deber ser.
Fuerte impronta positivista.
Obras literarias que carecen de contenido científico.
Finalidad literaria: proyecto político.
Los pensadores se constituyen como críticos de la realidad social.
Finales del siglo XIX, hasta mediados del siglo XX.
Exponentes: Ernesto Quesada, Ramos Mejías.
El sociólogo es un profesor universitario.
El sociólogo es un profesor que enseña la sociología europea.
La sociología es enseñada como materia en carreras universitarias como filosofía y derecho.
El sociólogo se dedica a traducir ensayos o tratado de sociología.
No hay producción sociológica sobre la realidad social en la Argentina.
Desde mediados del siglo XX.
Exponentes: Gino Germani, Roberto Carri, Arturo Jauretche, Pierre Bourdieu.

Etapa de la creación de la sociología como carrera universitaria como en la Universidad de Buenos Aires en 1957.

Se aplica un conocimiento científico (empírico) en los estudios sociológicos en la Argentina.

Se crean departamentos, institutos sobre investigación sociológica .

El sociólogo es un investigador.

RAMOS MEJÍAS Y QUESADA

Instituto Secundario Sagrada Familia. Asignatura: Sociología. Sexto año “A”. Apuntes de clases

Pensamiento Social en la Modernidad Argentina

Concepto de Multitud

Para el pensamiento europeo del siglo XIX, la noción de Multitudes referidos a los nuevos grupos sociales que se constituyeron como una verdadera amenaza para la burguesía (oligarquía) y objetos permanentes de disturbios.
La composición de estos nuevos grupos sociales estaban conformados por:

v Mendigos.
v Trabajadores.
v Inmigrantes.
v Obreros.
v Marginados.

El concepto de multitud es político y atraviesa todo el debate cultural, entorno a la clase proletaria emergente.

Dr. José María Ramos Mejías (1849-1914)

El doctor Ramos Mejías en el año 1889, publicó su libro “Las Multitudes Argentinas”. Texto cuyo lenguaje se asemejaba más a la ciencia que a la literatura. El objeto de investigación en esta obra fueron tanto las multitudes urbanas como las de tipo rural.
Mejías pretendió explicar las características de las multitudes rurales que generaron (a su entender) las guerras civiles en el pasado. Asociados estas multitudes a lo agresivo, lo animal, lo instintivo y hasta lo heroico. Sosteniendo que las multitudes rurales seguidoras de la figura del caudillo porteño Juan Manuel de Rosas se trasladaron hasta las orillas de las ciudades.
Ramos Mejías se preguntará ¿Dónde están ahora las multitudes? (hacia finales del siglo XIX). Y siguiendo la dicotomía que había planteado Domingo Faustino Sarmiento de civilización/barbarie. Este pensador social argentino diferencia entre Multitudes y grupos. Diciendo que las primeras presentaban las siguientes características: configuradas por aquellos quienes se expresan a través del tumulto y se manejan por instinto. Mientras que los grupos al contrario de las multitudes no se expresan por tumulto sino que deliberan y votan, no se manejan por instinto, asumen su responsabilidad y son conscientes de los problemas sociales, son una multitud de tipo estática, se tratan de la multitud social que concurre a los teatros y eventos culturales; influyen en la política pero de manera indirecta o sea a través de sus representantes.
Las nuevas multitudes están encarnadas en la llegada de los inmigrantes de toda Europa hacia finales del siglo XIX y principios del siglo XX a la República Argentina.
Inmigrantes que hicieron de Buenos Aires una de las ciudades más importantes de América Latina. Estos inmigrantes lejos de poblar el desierto (como hubiesen querido Sarmiento y Alberdi) se instalaron en la ciudad puerto de Buenos Aires y en otras importantes urbes de la Argentina. Configurando la nueva multitud de la clase media y obrera.


La Literatura del Dr. José María Ramos Mejías

Ramos Mejías realizó estudios en el que analizaba las patologías psíquicas de gobernantes, políticos y caudillos argentinos como el Fraire Aldao, Guillermo Brown, Monteagudo y Juan Manuel de Rosas. Plantea en sus obras establecer un estudio de la historia y la sociedad Argentina aunando sus conocimientos médicos y psicológicos de carácter sociológico. El intelectual plantea para la historia el revivir, el resucitarla, darle vida, algo imposible de materializar en la medicina.
En el texto “Rosas y su tiempo”, Ramos Mejías persigue la resurrección de Juan Manuel de Rosas y su contexto. Plantea la historiografía siguiendo una metodología no basada en la recopilación ni tampoco en la exploración de documentos.
Según el pensador argentino, la resurrección depende de tres factores:
Reponer la escena.
Reconstruir los decorados.
Reordenar los datos.

Los protagonistas, son definidos por Mejías como aquellos que guardan en sus memoria las representaciones aportando un documento oral que no posee valor alguno en el mercado.
El historiador, debe rescatar los detalles del momento histórico en que actuaron los protagonistas de la historia. Prestar atención a las palabras del testigo ocular por que los hechos quedaron impresos en su memoria. “(…) el historiador debe trabajar como un arqueólogo que excava en las capas del recuerdo”
Los antiguos sirvientes, según Ramos Mejías, son los mejores informantes quienes tienen conocimiento sobre los detalles más íntimos de los protagonistas de la historia; quienes están al tanto de los problemas de alcoba de sus amos.
Ramos, a través del análisis de más de ochenta pinturas en las que está retratado Juan Manuel de Rosas tratará de deducir los comportamientos a partir de su fisonomía.
La fisonomía facial ofrece datos de la personalidad de los sujetos.

Ernesto Quesada (1858-1934)

Cuadro de situación a comienzos del siglo XX
.

Las multitudes inmigrantes llegadas en su mayoría desde Europa, crearon los primeros sindicatos en la Argentina. Difundiendo ideología anarquista y socialista provocando los primeros conflictos sociales y políticos.
A través de la F.O.R.A (Federación Obrera de la República Argentina), comenzaron las primeras acciones huelguistas tomando por sorpresa a la clase dominante.
Paralelamente a la situación social en la Argentina de comienzos del siglo XX, comienza el dictado de las primeras cátedras de sociología positivista. Fue Ernesto Quesada uno de los profesores titulares de la cátedra de sociología.

Quesada y la sociología.

La sociología era concebida desde el pensamiento de Quesada como un instrumento científico, socialmente neutral al servicio de un Estado que debía elevarse y ser imparcial para reconciliar los antagonismos sociales entre los patrones y los obreros. La sociología se trataba de una ciencia que podía darle al Estado los medios para conocer la realidad social. En sus inicios, el pensador, se identificó con el positivismo de Comte y Spencer y luego con la teoría relativista de Spendengler cuyos estudios introdujo en el país.
Quesada, sostuvo que la sociología era la síntesis de las demás ciencias sociales. Vio en la sociología la construcción de un saber sobre el “otro” que contribuyera a la transformación social y política del Estado.
Decía de la sociología, que era la ciencia social que brindaba a los jóvenes universitarios el conocimiento acerca de la organización social necesaria para formar buenos ciudadanos quienes serían los destinatarios del sistema político democrático. La nueva ciencia social (sociología), no sólo trataba la racionalización de las conductas de los hombres a partir de recolectar nociones comunes de los fenómenos sociales dando lugar al nacimiento de leyes generales.
Coincidiendo con Marx, Quesada sostenía que la economía era el meollo vivo de la sociedad y captar la verdad sobre la economía moderna era comprender los hechos importantes de la sociedad moderna.
Quesada se reconocía así mismo como un “reformador social”. Se planteó mostrar los cambios que produjo el progreso técnico en las sociedades nuevas y modernas como Australia o Estados Unidos, pretendiendo mostrar las transformaciones que en la organización social y las instituciones políticas implicaba el progreso y la creciente amenaza del antagonismo social.
“La Cuestión Social”, será para Quesada el punto candente del siglo XX y lo que provocará cambios en el orden social.
El intelectual, plantea la inquietud en cuanto a cómo evitar el aumento de la pobreza y la concentración de la riqueza en manos de unos pocos. Se adelantará y alertará la posibilidad de un estallido social y político que tendrá lugar tiempo después en el Centenario. Ferviente católico, Ernesto Quesada, observo en la Encíclica Rerum Novarum la posibilidad de la vía pacífica a la “cuestión social”, sosteniendo que las ideas liberales exacerban los conflictos de clase.

Antonio GRANSCI

Instituto Secundario Sagrada Familia. Asignatura: Sociología. Sexto año “A”. Apuntes de clases

Antonio Gramsci

Datos Generales del Pensador

Italiano, nacido en 1891 y fallecido en 1937. 46 años de vida.
Miembro del Partido Socialista Italiano (Secretario del Partido).
Militante por la causa proletaria.
Con el fascismo de Benito Mussolini, fue arrestado en 1926 y liberado solo 6 días después de su fallecimiento.

Producción Teórica de Antonio Gramsci

Plantea dos objetivos:
1. Explicar el fracaso de la revolución proletaria en occidente (Europa Occidental).
2. Elaborar estrategias (desde su perspectiva de militante revolucionario) para el triunfo de la revolución en occidente.

Cuadro de Situación

· En 1917 tiene lugar el triunfo de una revolución Marxista producto de una “Guerra de Movimientos” y un avance sobre el poder Político. Y la construcción de una “Sociedad Socialista”.
· El movimiento revolucionario fracaso en la Europa Occidental (sobre todo Alemania).

Gramsci, se dispondrá a explicar el concepto de Hegemonía:
Para teorizar el papel de la clase obrera en una revolución burguesa.
Referido al papel de la clase obrera en una revolución contra el orden feudal.
El triunfo de las clases subalternas (el proletariado o grupos sociales subordinados a la burguesía), solo es posible construyendo un nuevo sistema hegemónico que tendiera a una sociedad sin clases.

Gramsci, plantea una “guerra de movimientos” o posiciones, donde las posiciones se van conquistando lentamente.
El pensador, entiende a la hegemonía en dos sentidos:
Amplio: Comprende una hegemonía de tipo económica, política y cultural.
Restringido: Referido a la hegemonía de tipo cultural.

En la Hegemonía hay una negociación en el que las clases dominantes ceden beneficios materiales y simbólicos y ceden espacios en la construcción del consenso. Los espacios cedidos por la clase dominante abren puertas a nuevas visiones del mundo y a organizaciones alternativas. Espacios desde el cual empiece a construirse una contra-hegemonía.
La hegemonía para Gramsci debe ser:
_Construida.
_Lograda con un trabajo en pos de lograr un consenso.
_Puede entrar en crisis y ser perdida.

Las burguesías de las democracias liberales de occidente, se produce una hegemonía económica y de mantenimiento de una orden por la coerción y la fuerza de la dictadura.
Se construye un “bloque histórico” cuando existe hegemonía de una clase fundamental.
Gramsci, plantea la existencia de un nexo entre estructura y hegemonía. Hay una relación de mutua constitución entre estructura y superestructura.
A través del concepto de “bloque histórico” es posible superar una dicotomía entre estructura y superestructura.
La estructura y la superestructura forman un bloque histórico. A nivel de superestructura, Gramsci, distingue “Ideologías Orgánicas” que corresponde con la realidad histórica y podría realizarse históricamente. Poseen validez psicológica que organizan las masas humanas y forman el terreno en el que los hombres se mueven, luchan y adquieren conciencia.
Gramsci ubica entre la estructura y la superestructura a los Intelectuales. Estos son los que permiten un vínculo orgánico entre estructura y superestructura y entre sociedad civil y sociedad política. Son quienes crean la ideología que corresponde a los intereses de la burguesía.
Los Intelectuales Orgánicos permiten la existencia de una relación orgánica entre estructura y superestructura, como entre sociedad civil y sociedad política.
La sociedad civil, tiene un vínculo orgánico con la estructura en cuanto es consenso logrado por alguna de las clases fundamentales.
Para Gramsci, las clases fundamentales son los proletarios o la burguesía. El bloque histórico, es dividido por el pensador italiano en sociedad civil (formada por el conjunto de los organismos llamados privados) y sociedad política (corresponde a la función de hegemonía que el grupo dominante ejerce sobre la sociedad).
Para Antonio Gramsci el Estado, es igual a la suma de la sociedad política más la sociedad civil. Reconociendo en un Estado Ético la función de elevar a la gran masa de población al nivel cultural y moral que corresponde al desarrollo de los intereses de las clases dominantes.
¿Quiénes son los intelectuales? Todos aquellos quienes, por papel principal en la sociedad tienen el de intelectuales.
Los grados de intelectualidad Gramsci los diferencia entre:
_En el más alto grado se colocan los creadores de las diversas ciencias.
_En el grado mas bajo se ubican los divulgadores de la riqueza intelectual existente.

Los intelectuales Tradicionales, son aquellos quienes fueron intelectuales orgánicos en un modo de producción anterior.
Para Gramsci los Intelectuales Orgánicos son los vinculados a un grupo fundamental. Grupo fundamental es aquel que los es por su necesaria existencia en las relaciones de producción de un determinado modo de producción y grupo fundamental en la estructura. Son quienes construyen la hegemonía y dan conciencia y homogeneidad al grupo fundamental que surge de la estructura y permiten ser la dirección del bloque histórico.
Gramsci sostendrá que primero se logra la hegemonía y luego la conquista del Estado. Los intelectuales del proletariado debían promover la disolución del Estado-Gobierno, del Estado en sentido restringido, como forma de alcanzar una sociedad sin clases. Para que desaparezca la explotación del hombre por el hombre, debe desaparecer el Estado en sentido restringido.
Para Antonio Gramsci, los intelectuales son los empleados del grupo dominante para el ejercicio de las funciones subalternas de la hegemonía social y del gobierno político. Son quienes elaboran, administran y difunden la ideología.
El autor de origen italiano, diferencia las funciones de la sociedad civil y la sociedad política. Las funciones que atribuye al primer tipo de sociedad son de consenso, de lograr una clase fundamental y de dirigir la cultura en la sociedad. Las funciones de la sociedad política son de coerción, comprende el estado-gobierno en sentido restringido que incluyen el poder Legislativo, el poder Judicial, el poder Ejecutivo, además de las fuerzas armadas y policíacas.
En la teoría, Gramsci, les asigna a los partidos políticos la función de nexo entre la sociedad civil y la sociedad política. Además sostiene que estos son importantes en la construcción de un nuevo sistema hegemónico y en la elaboración y difusión de las ideologías.
Antonio Gramsci define a la Ideología como la concepción del mundo y de la vida. Que se manifiesta implícitamente en el arte, el derecho, la actividad económica en todos los aspectos de la vida. Identificando y definiendo a las Ideologías Arbitrarias en cuanto a que no poseen trascendencia histórica, no tienen nexo con la estructura ni con las ideologías orgánicas.
La estructura ideológica, comprende las organizaciones que crean y difunden la ideología encargándose del mantenimiento del consenso, como por ejemplo la escuela, la iglesia, como las mayores organizaciones culturales.
El pensador italiano ordena e identifica en forma jerárquica los Medios Técnicos de Difusión:
La escuela.
Los periódicos.
El arte (escritores).
El teatro.
La radio.
Reuniones religiosas.
Diálogos entre sujetos (conversaciones entre sujetos)


Grados Cualitativos de ideologías:
1. Filosofía: Ubicados por Gramsci en el nivel más alto de elevación. Encargados de plasmar una ideología en el nivel más acabado de elevación. Se torna una norma de acción colectiva lográndose cuando la filosofía forme parte del sentido común. Los partidos políticos son centrales en la construcción de la filosofía. El filósofo es el político que modifica el ambiente.
2. Sentido Común: Cada estrato social posee su sentido común. Un sentido común que no es rígido, por el contrario se transporta continuamente, enriqueciéndose de nociones científicas y opiniones filosóficas. El sentido común crea una fase de conocimientos populares en un tiempo y un lugar.
3. Folklore: Ubicado por Gramsci en el nivel más bajo de ideología; un “aglomerado indigesto” de resabios de visiones del mundo que se desarrollaron en modos de producción anteriores que se desarrollaron en modos de producción anteriores y que sobreviven.
La concepción del mundo no sólo no elaborada y asistemática, ya que el pueblo por definición no puede tener concepciones elaboradas sistemáticas y políticamente organizadas y centralizadas aún en su contradictorio desarrollo… un aglomerado indigesto de fragmento de todas las concepciones del mundo y de la vida que se han sucedido en la historia, de la mayor parte de los cuales sólo en el folklore se encuentran, sobrevivientes, documentos mutilados y contaminados.
La Moral del Pueblo, es entendida como un conjunto determinado (en el tiempo y el espacio) de máximas para la conducta práctica y de costumbres que se derivan de ella o la han producido, moral que está estrechamente ligada, como la superstición, a las reales creencias religiosas: existen imperativos que son mucho más fuertes, tenaces y efectivos que aquellos de la “moral oficial”
El folklore, es considerado en el pensamiento de Gramsci como una valla, un inconveniente, que deben sortear, como una concepción del mundo, que deben combatir no sólo los intelectuales de la burguesía sino también los intelectuales de las clases subalternas. Constituyen una traba en cuanto esta “moral del pueblo”, que incluye supersticiones, creencias religiosas, en tanto son “maneras de ver y de obrar”.
El folklore no debe ser considerado como algo raro, o extraño o como elemento pintoresco, sino como algo muy serio que exige ser tomado en cuenta. Sólo así será más eficiente su enseñanza y determinará realmente el nacimiento de una nueva cultura moderna y cultura popular o folklore.
Si bien para el pensador italiano, el folklore es considerado como una traba no sólo cultura de la burguesía, también señala la posibilidad de que existan objetivamente elementos “progresivos”, que puedan favorecer la construcción y difusión de la nueva concepción del mundo.
En Los Cuadernos de la Cárcel, Gramsci escribe, queda claro que generalmente el folklore es un inconveniente tanto para la burguesía como para el proletariado.

Fuente Bibliográfica: Gramsci, Antonio: “Política, Sociología y Teoría Social.” Ed. Paidós, Barcelona. 1997